Castilla, un resurgimiento material necesario

Por un castellanismo contra la Agenda 2030

"Los que aseguran que es imposible no deberían interrumpir a los que estamos intentándolo" (T. A. Edison).

domingo, 17 de noviembre de 2019

Sindicato Montañés de Iniciativas para el fomento del Turismo

(El Cantábrico: diario de la mañana, 23 de enero de 1935, p. 4)

En el salón de actos de la Cámara de Comercio, y bajo la presidencia del señor Gutiérrez (don Julián), se reunió el pleno del Sindicato Montañés de Iniciativas para el fomento del Turismo, asistiendo también las representaciones de la Diputación provincial y del Ayuntamiento.

Leída el acta de la sesión anterior, fue aprobada.

El señor presidente de la sesión de Propaganda y fiestas del Sindicato dio a conocer el proyecto de programa de fiestas para el verano próximo, proyecto, como ahora se dice, de gran envergadura, y que comprende diversos espectáculos de carácter popular en mar y tierra, manifestaciones de orden deportivo, fiestas de carácter folklórico montañés, un homenaje de carácter nacional al ilustre maestro Falla y otros actos, que constituirán un poderoso elemento de atracción veraniega para Santander y diversos lugares de la provincia de Santander.

En el proyecto de programa para el próximo verano figura también la conmemoración de la unidad castellana, festival de exaltación a Castilla, cuya organización es propósito ofrecer a la Diputación de Santander, para que ésta invite a su vez a colaborar a las restantes Diputaciones castellanas para el mayor esplendor de este magno y patriótico acto.

En principio, fue aprobado el programa, felicitándose a su autor, y acordándose los procedimientos a seguir para recaudar la cantidad necesaria con que sufragar los gastos, que, como puede comprenderse, son de bastante importancia.

La presencia dio cuenta de las gestiones realizadas cerca de la Federación Nacional de Sindicatos de Turismo, aprobándose éstas, y acordándose solicitar el ingreso en la misma del Sindicato Montañés de Iniciativas.

También informó el señor Gutiérrez de la visita hecha, en compañía del señor Saro, a determinadas personas de positiva influencia en el Gobierno, exponiéndolas el programa del Sindicato y recabando su colaboración para conseguir la ayuda económica del mismo, como hace con otras poblaciones veraniegas. De estas visitas, los comisionados sacaron muy buena impresión.

Se dio lectura a varias cartas de estimados convecinos que ofrecen cooperar con entusiasmo a la labor del Sindicato y prestar su concurso moral y económico para su mejor desenvolvimiento. Se acordó aceptar y agradecer estas aportaciones, de las que en su día se dará publicidad para que todos las conozcan e imiten.

Se dio lectura a la circular que en breve se distribuirá a las Corporaciones oficiales y particulares, Sociedades y a todos los montañeses de buena voluntad que deseen contribuir a dar realidad a los propósitos del Sindicato en favor del fomento del turismo en la provincia de Santander y del veraneo en nuestras playas, a las que acompañará el correspondiente boletín de suscripción, para que unas y otros se inscriban con la cuota que juzguen oportuna, sin cuya ayuda no podrá llevarse a cabo una actuación que moral y económicamente ha de favorecer mucho a Santander.

En la reunión, que se prolongó más de lo acostumbrado en este género de sesiones, en las que todos y cada uno de los asistentes exponen y defienden con cariño iniciativas de beneficio general, se trataron otros muchos asuntos de orden local y provincial, tomándose diversos acuerdos con el respeto a los mismos, que irán dándose a conocer a medida que se pongan en práctica.
 

martes, 5 de noviembre de 2019

La nueva "Junta Santa" Elementos castellanistas

Comparecencia ante España de un grupo libre de castellanos

El acto de ayer en la Cámara: significación de la conferencia, proposiciones presentadas, se acuerdan importantísimas orientaciones. Detallada información

(El Adelanto, diario político de Salamanca, 28 de enero de 1919, p. 1)

Nuestros lectores saben por la nota ayer publicada por EL ADELANTO, que diversos y caracterizados elementos de la intelectualidad castellana que no se consideran representados por los organismos oficiales que han hecho acto de presencia en el pleito de la nueva estructura política española, habían llegado a nuestra ciudad para constituir una nueva "Junta Santa" que fuera el germen propulsor de un poderoso movimiento de libertad y de renacimiento castellano. Creían los elementos que ayer se reunieron en la Cámara de Comercio que al comparecer ante España las regiones para otorgar su voto en el nuevo sistema orgánico y político que va a dividirse, la personalidad de Castilla había sido suplantada por las más viejas y fieles instituciones corporativas del tinglado caciquil. Y para esto, para afirmar ante este país que la conciencia castellana aún no ha comparecido con toda su viva potencia renovada, con todos los problemas vastísimos que ha de presentar para una urgente solución, se reunieron ayer, en el salón de actos de la Cámara de Comercio, un núcleo representativo de la intelectualidad de Castilla. El lector juzgará la importancia del acto por las personalidades que en el mismo tomaron parte.

Los asistentes. Adhesiones

Estuvieron presentes en la reunión los señores siguientes: D. Juan Díaz Caneja, abogado y publicista de Palencia; D. Óscar Pérez Solís, publicista; D. Federico Landrove, catedrático de la Escuela Normal, y sr. Cabello, periodista y delegado de Castilla la Vieja en la Unión General de Trabajadores; Sr. Garrote, profesor de la Facultad de Medicina, y Sr. Prada, profesor de la Facultad de Derecho, todos de Valladolid; Sr. Vellando, ingeniero agrónomo, jefe del reformismo de la provincia de Ávila; Sr. Zumárraga, exdiputado a Cortes y abogado; D. Leoncio Escudero, vicepresidente de la Cámara de Comercio; D. Fidel Domingo Monedero, comerciante, y D. Mariano Gonzalo, industrial de Burgos; Sr. Ruipérez, abogado de Peñaranda; señores Bernis, Íscar-Peyra (D.F.), Villalobos, Giral, Sánchez Rojas, Sánchez-Gómez y Rayo, de Salamanca.

Por enfermedad, no asistieron los Sres. Pinilla (don C.) y Ledesma (D.A.).

Enviaron entusiastas y calurosas adhesiones al acto D. José Cascón, ingeniero agrónomo de Ciudad Rodrigo; Sres. Suñer y García del Real, catedráticos de la Facultad de Medicina; D. Alfredo Rojas Escribano, profesor de la Escuela de Comercio de Valladolid; señor Rivera Pastor, catedrático de la Universidad Central; D. Leandro G. de Cadiñanos, abogado de Burgos; D. José Eguiagaray Pallarés, médico de León; D. Rafael López de Haro, notario y novelista por La Mancha; Sr. Pérez España, abogado; Sr. Sáinz de Porres, abogado de Burgos; D. Rafael Escrich, profesor del Instituto de Logroño, y D. José María Arcayo, abogado del Estado, en Logroño.

El acto. Primera proposi[ci]ón

Don Francisco Bernis, el admirado maestro de todos, pronunció un bello y elocuente discurso, dando las gracias a los elementos forasteros que habían llegado a Salamanca guiados por un alto ideal, que iba a concretarse en un movimiento de afirmación castellanista. El Sr. Bernis invitó a los reunidos a exponer libremente las orientaciones que cada grupo sustentara para comenzar las deliberaciones.

El Sr. Díaz Caneja manifiesta que se congregan en esta veneranda Salamanca los hombres inquietados por las hondas preocupaciones espirituales para determinar la actitud a adoptar frente al movimiento revisor de la política española.

El Sr. Íscar dice que debe ser punto de partida preferente en la discusión la protesta más firme por la suplantación de la personalidad castellana realizada en la asamblea de Diputaciones de Segovia. La proposición incidental es previamente acordada por los reunidos.

Después el Sr. Bernis presenta a la consideración de todos las siguientes afirmaciones, que deben
ser objeto de acuerdo en esta reunión preliminar.

Proposición de los Sres. Bernis y Ledesma

Dice así:

"Los que suscriben presentan a la deliberación y examen de las personas reunidas en Salamanca el día 27 de enero de 1919, las siguientes conclusiones, como resumen de su modo de ver el movimiento de afirmación castellana.

1.º Afirmación regionalista.- La nueva era de la historia española exige la revisión de todos los valores políticos, sociales y económicos y de todas las organizaciones e instituciones recibidas. Pugna por nacer una nueva constitución de la patria, basada en la exaltación y utilización hasta el maximum de las energías latentes del país. Esto requiere la restauración de las regiones y la atribución a los nuevos poderes regionales del gobierno y administración de sus peculiares intereses. La reunión de Salamanca es esta afirmación que en nombre de Castilla hacen ante el Estado oficial y ante España unos cuantos hombres de buena voluntad; queremos sustraer a los organismos oficiales y a las representaciones, hoy apoderadas del Gobierno, nacional el régimen y dirección de los intereses materiales y espirituales de Castilla, para entregarlos a otros organismos a representaciones, a cuyo nacimiento y desarrollo dedicaremos nuestros trabajos.

2.º El estudio.- Para que la organización espiritual, política y económica de Castilla quede cimentada con toda firmeza y para evitar los errores trascendentales en la interpretación y resolución de los problemas vivos de la región, debe ir acompañada toda nuestra actuación de un asiduo y constante estudio de la realidad. No pretenden los que suscriben ser ellos los que hagan el estudio, o, en cuanto lo hicieren participando en él, los que hallen las convicciones soluciones; pero tienen fe en que los hombres autorizados y austeros, que son necesarios para esta obra, vendrán o espontáneamente, o por requerimiento que se les hará y desde ahora se compromete el grupo de Salamanca a organizar un Congreso de Estudios Castellanos, buscando para ello como en todo, principalmente la colaboración de personas, que sin hurtar en lo más mínimo sus opiniones políticas y religiosas, sean representativos de alguno de los grandes sectores del esfuerzo útil e inteligente: el cultivo teórico de los problemas, los intereses profesionales y sindicales y actividad político-administrativa en el noble sentido de esta palabra.

3.º La acción.- Para que la reorganización castellana sea posible, es además necesaria una actuación pública, una propaganda en la ciudad y en el campo un contacto cordial y reiterado con los que trabajan y con los que poseen, con los que sufren y los que gozan de holgura, así con los que simpaticen con nosotros como con los que dignamente nos combatan. En esta actuación, a la que desde luego nos declaramos dispuestos, será muchas veces lo principal la divulgación de la importancia y necesidad de las modificaciones estructurales y espirituales que se intentan ofreciendo informaciones y expresando orientaciones.

Esperamos que nos acompañará la perseverancia en los más puros propósitos y el despertar de las almas, que, por ventura, se observa en Castilla, impacientes por ofrendar a la patria la certeza de que han sobrevivido los más sublimes gérmenes de la superioridad de la raza.

4.º Extensión del movimiento.- Para que el movimiento se produzca sobre toda aquella extensión territorial que exige la naturaleza castellana, consideramos preciso un intercambio de informaciones, de opiniones, de esfuerzos, y una elasticidad que haga posible ampliaciones constantes, todo ello presidido para la cordialidad y mutua estima respetuosa de las personas, y, al mismo tiempo, para evitar una constitución falsa y artificial de la región, dejar que prevalezcan probadísimas y recíprocas utilidades, con todo lo cual se llegue a una objetiva y firme compatibilidad de intereses y afectos.- Francisco Bernis. Ángel Ledesma".

La anterior proposión es objeto de un minucioso y detenido, examen, en el que intervienen los Sres. Pérez Solís, Landrove, Íscar, Vellando, Zumárraga, Díaz-Caneja, Sánchez Rojas, Escudero, Rayo, Prada y Giral. La deliberación continúa hasta las dos menos cuarto, hora en que se suspende el acto para reanudarlo después.

El banquete

Servido admirablemente por el Hotel Términus, con arreglo a selecto menú, los asambleístas fueron obsequiados por el grupo de Salamanca con un banquete, que presidió, invitado al efecto, D. Miguel Unamuno.

Se reanuda la sesión

Otra vez en la Cámara y ausente el Sr. Bernis, por ocupaciones privadas, se presenta la siguiente proposición:

Afirmaciones

1.ª Castilla tiene que aunar su personalidad en el movimiento de renovación de valores políticos y sociales que se han iniciado en nuestra patria y fuera de ella.

2.ª Castilla no puede obtener ese efecto en tanto subsista la actual constitución política de España, cuyos órganos de Gobierno -nacionales, provinciales o municipales- son completamente inadecuados para crear y dirigir las nuevas y necesarias modalidades de la vida castellana.

3.ª Castilla debe establecer órgano de Gobierno propio, que regule la vida en lo peculiar de ella.

Puntos de contacto

1.ª Organización política de Castilla sobre la base del municipio autónomo y con la obligada desaparición de las actuales Diputaciones.

2.ª Organización económica de Castilla sobre la base de modificar el "statu quo" en el régimen de la propiedad agraria.

3.ª Lucha franca contra todas las organizaciones oligárquicas imperantes en Castilla.- Pérez Solis, Díaz Caneja, Garrote, Landrove, Sánchez Rojas y Cabello.

La proposición que antecede es objeto de amplio debate, que suscitan algunas aclaraciones del Sr. Íscar.

Dice el diputado provincial de Salamanca que condiciona su voto en cualquier punto de contacto de las nuevas fuerzas castellanas mientras no se revista de garantías plenas la eficacia de la autonomía municipal.

A sus instancias, dicha base queda redactada así: Organización política de Castilla sobre la base del Municipio autónomo y con la obligada desaparición de las actuales Diputaciones provinciales, previa la adopción de cuantas garantías sean necesarias para que la libertad del Municipio sea efectiva.

La base segunda de este segundo apartado de la proposición se modifica también a instancias del señor Íscar, que anuncia su potencia especial en las modificaciones del régimen agrario, en este sentido:

Organización económica de Castilla considerando como problema fundamental, pero no único, la modificación del actual régimen de propiedad de la tierra. La tercera base queda redactada por el Sr. Villalobos de la siguiente forma: Intensa, especial y solidaria actuación contra todas las organizaciones oligárquicas que actualmente usurpan las representaciones políticas de Castilla.

A las anteriores bases fueron agregadas las siguientes:

4.ª Todas las orientaciones doctrinales y políticas que entrañan los anteriores puntos acordados y cuantas otras tengan relación con ellos, serán objeto de ponencias especiales, que cada grupo de los congregados en esta reunión somera a una asamblea general, que se celebrará en Burgos, en la primera quincena de marzo próximo.

5.ª La reunión delega en los Sres. Íscar, Pérez Solís, Díaz Caneja y Zumárraga para que fijen y convoquen la fecha de celebración de la asamblea, así como su organización y funcionamiento. Las bases anteriores se acordaron por unanimidad.

Proposición del Sr. Íscar

Don Fernando Íscar-Peyra presentó su proposición particular en las siguientes bases:

1.º El convencimiento de que Castilla, al comparecer ante España para expresar sus aspiraciones, en relación con un nuevo régimen de constitución nacional, se encuentre suplantada por los organismos oficiales que se han atribuido con malicioso abuso de su influencia política, la representación de la voluntad castellana.

2.º El convencimiento de que para no incurrir en errores trascendentes al considerar los problemas reales y vivos de Castilla, que han de ser la base de su reorganización política y social, debe proceder a toda afirmación concreta, un estudio urgente y honrado de dichos problemas; estudio no realizado aún, sino de un modo distraído y superficial.

3.º El convencimiento de que en la parte de Castilla que está más al alcance de nuestra observación, no se ha producido esa sensación de ansiedad, ni siquiera una impresión de desasosiego y curiosidad respecto al programa de reorganización intensa de la vida política y económica de los municipios y regiones; siendo necesaria una campaña que divulgue en las zonas rurales la importancia e las modificaciones que se intentan, recogiendo la opinión de los municipios y asociaciones, pero facilitando de antemano a las corporaciones que no estén preparadas para emitir una opinión reflexiva, los datos de información que les ilustren y orienten en dicha materia. Única manera de crear un estado de conciencia castellana.

4.º El convencimiento de que es preciso un intercambio de informaciones, ordenadas y constantes, entre los elementos libres de las ciudades castellanas para que, de organizarse el régimen regional, no pueda nunca constituirse una falta y artificial región, fundándose en equívocas referencias históricas, sin que se establezca esa comunidad de ciudades y provincias castellanas sobre la base de probadísimas y recíprocas utilidades, de absoluta compatibilidad de ambiciones y con la más firme unanimidad de afectos.

5.º El convencimiento de que al plantear Cataluña el problema de las autonomías o sea el de su deseada emancipación de la funesta dirección centralista, ha recogido en esa iniciativa el común sentir de un importante núcleo castellano, que no se siente agraviado en sus sentimientos patrióticos por las demandas catalanas, creyendo perfectamente lícitas las aspiraciones de independencia regional, dentro de los ideales máximos de España.

Proposición del grupo socialista

Los Sres. Pérez Solis, Sánchez Rojas, Sánchez Gómez, Landrove, Garrote y Cabello, concretaron su posición en el movimiento castellano en las siguientes bases:

Aspecto político.- Autonomía del Municipio como base de la autonomía regional.

La autonomía municipal se entenderá íntegra en cuanto se refiere a intereses morales y materiales peculiares del Municipio.

Distinción entre Municipios urbanos y rurales, a los efectos de constitución del Ayuntamiento; concejo abierto para los Municipios menores de 500 vecinos; Ayuntamiento elegido por sufragio universal, en los demás.

Concierto económico de los Municipios y mancomunidades municipales con el Estado. Libertad de los Municipios en materia de tributación cuando ésta no afecte a la circulación general de la riqueza. El vecindario de todo el Municipio tendrá derecho de referencia en todas las cuestiones de tributación a la Hacienda municipal.

Enseñanza primaria, a cargo del Estado; las de otros grados u órdenes, potestativa de los organismos municipales.
Facultad de destitución de los concejales por parte de la mayoría del vecindario y responsabilidad civil personal de los concejales.

Desaparición de las Diputaciones provinciales.

Facultad de los Ayuntamientos para mancomunarse, pero sin solución de continuidad territorial.

Concejos de mancomunidad elegidos por sufragio de los Ayuntmaientos mancomunados. Y en todo caso concejal regional elegido en igual forma.

Aspecto económico.- Reforma de los contratos de arrendamiento, estabilizando al arrendatario en la tierra que cultiva hasta conferirle la propiedad de ella.
Impuesto progresivo hasta la expropiación de las tierras que sus propietarios no dediquen al cultivo.

Abolición de los censos.

Incorporación de la propiedad colectiva del Estado al Municipio, formando con ella los territorios  incultos municipalizados y las adquisiciones del Concejo la propiedad comunal, que debe darse en enfiteusis a las comunidades de labradores y jornaleros.

Precios máximos y mínimos de los productos agrícolas.

Supresión de los contratos de aparcería en cuanto signifiquen una forma del trabajo a destajo. El Municipio debe ser el iniciador o el propulsor de las empresas de cooperación y crédito agrícolas.

Aspitación máxima: implntación del Municipio colectivista.

Termina el acto

Leídas que fueron las cinco proposiciones primeramente, presentadas al reanudarse la sesión de la tarde, los reunidos expresaron su cordial agradecimiento y público testimonio a la Cámara de Comercio y a su presidente, Sr. Pérez Cardenal, por su deferencia en la cesión del local.

Seguidamente, y en medio de una cordialidad y efusión mutuas, se dio por terminado el acto.

Ayer mismo regresaron a los respectivos domicilios los asambleístas forasteros.

Comentario

Imparcialmente, serenamente, hemos de confesar que el acto celebrado ayer en la Cámara de Comercio de Salamanca tiene la significación marcadísima de interés por los elementos que en él tomaron parte. Son representantes todo ellos de sectores intelectuales de Castilla de la más selecta representación y muchos de ellos caudillos de movimientos políticos, que arrastran tras de sí fuerzas numerosísimas y masas enormes de opinión civil.

Significa, además, el acto la esperanza legítima de una renovación seria en el esquema estructural

del régimen político castellano, a cuyos hondos, fecundos, cordiales e interesantes problemas han dedicar estudio preferente y mediación documentada las nuevas fuerzas regionales que aparecen pujantes y juveniles en la política de la nación. El ADELANTO quiere recoger en sus columnas y a ella dedicará sus devotas simpatías, esta vibración de la inquietud espiritual que surge con toda la sana mocedad de un apostolado dispuesta a revisar con justa medida de crítica la posición que ha de adoptar la meseta castellana en la futura labor constructiva de una nueva España, más fuerte, más rica, más próspera, más feliz y humanizada.
  

lunes, 4 de noviembre de 2019

[Reunión en Valladolid]

(Lucha, 17 de julio de 1908, p. 2)

Leemos que en una reunión de representantes de las fuerzas vivas de la ciudad, celebrada en el Ayuntamiento de Valladolid para tratar de sus próximas ferias, se dio cuenta de un proyecto de celebración de La Fiesta de Castilla, que constará de los siguientes puntos:

1.º Celebrar una Asamblea castellana, cuyo objeto sería:

a) Definir el regionalismo castellano.

b) Redactar el programa de las sanas medidas que se han de adoptar en beneficio de Castilla, tanto en el orden político como en el económico y en el intelectual.

2.º Realizar un acto de solidaridad de los asamblistas [sic], que puede consistir en una reunión íntima, terminada con un banquete.

3.º Fiestas populares castellanas.

a) Gran cabalgata alegórica.

b) Juegos florales y gran velada en honor a Castilla.

viernes, 1 de noviembre de 2019

[Defensa de los productos castellanos]

(La Correspondencia de España, diario universal de noticias, 22 de noviembre 1884, p. 3)

La prensa de Valladolid ha sido convocada por el presidente de la diputación provincial. El señor presidente manifestó a los concurrentes los acuerdos adoptados por la comisión de diputados nombrada para el efecto de reclamar ante el gobierno lo que fuese oportuno con vista del tratado con los Estados Unidos; que había oficiado a todos los ayuntamientos de la provincia y diputaciones provinciales de Castilla la Vieja; que hace dos días ha sido la comisión de la de Palencia, compuesta por los Sres. Monedero y Barrio, y que se proyecta una reunión general para el día 1º del mes próximo; y término manifestando la suposición de los periódicos de la capital ayudarán a la comisión en todo lo que a este asunto se refiere, a lo cual todos reiteraron el interés que les inspiran las gestiones conducentes a la defensa de los productos castellanos.

jueves, 31 de octubre de 2019

Un gran libro: El Valor de Castilla

(El avisador numantino, 24 julio 1926, p. 1)

Con amable dedicatoria, que mucho agradecemos, por que mucho nos honra, recibimos un ejemplar de la magnífica obra "El valor de Castilla". - (Estudio económico y semipolítico)- que ha publicado
el ilustre escritor don Gregorio Fernández Díez.

Es un trabajo meritísimo el que ha llevado a cabo nuestro querido amigo, complemento digno del que realizaron Picavea, Costa, Carretero, Represa, De la Serna y H. del Villar al estudiar problemas interesantes de la vida de España y de la actuación de Castilla.

Campea en la obra del señor Fernández Díez el optimismo redentor de los hombres que se enfrenten con los prejuicios de las gentes sin fe, sin arrestos y sin dignidad ciudadana, hábiles solo para injuriar a Castilla aplicándole defectos y dicterios, muy gastados en lucubraciones de los pseudo-intelectuales que aspiran a distinguirse lanzando falsedades deprimentes contra la región que fue la cuna de la nacionalidad española.

Castilla, la del "pardo sayal" la "silente plaza" la de la "sombra de Caín", la que ha consentido que en las paredes de su mansión señorial pegasen carteles infamantes algunos excéntricos literatos, de pobre ingenio y de mísera contextura espiritual, esta Castilla noble, generosa y mártir, tiene en el recio escritor señor Fernández Díez un defensor, que con razones, con números y con realidades, demuestra lo que es nuestra tierra, lo que significa, cuáles son sus virtudes y cuáles sus efectos.

Hace pocos días, leíamos en un periódico manchego, causándonos, no indignación, sino asco, entre otras majaderías, las siguientes:

Y Castilla es un ruinoso, y gigante Camposanto;
en Castilla todo es muerte, todo es luto, todo es llanto.
En Castilla ya no queda un espíritu con fe.
En sus llanos no germina ni fecunda la semilla;
es estéril el barbecho de las almas de Castilla
y en sus campos y en sus hombres, el Destino ha escrito: ¡fue!

Contra esta laya de poetastros simiescos, que usan un diccionario de voces, las cuales todas caben en la palma de la mano, aprendidas en la escuela decadentista; contra el egoísmo fanfarrón de catalanes
y vascongados, contra los castellanos que no tienen confianza en sus propios medios se alza el autor de "El valor de Castilla" abrumándolos con la lógica de los asertos y con el patriotismo de sus razones.

Expone el señor Fernández Díez en brillantes páginas, con prosa correctísima y viril, el inventario de la riqueza moral y material que atesora Castilla; fórmula acertados juicios, en los capítulos dedicados a la reconstrucción castellana, a los ferrocarriles; a la riqueza hidráulica, a la minería, a la repoblación forestal, a los riegos, a la agricultura y a la industria. Señala, por último, las normas que los castellanos han de seguir para exaltar su personalidad y hacer que sea respetada por propios y extraños, y para que la riqueza, mediante el útil empleo de la actividad, de la inteligencia y del capital, surja en las provincias castellanas esplendorosamente.

Coinciden las doctrinas y las ideas del autor de "El valor de Castilla", con las que nosotros, con menos destreza literaria, venimos divulgando y son fiel reflejo de las aspiraciones que sienten los buenos castellanos.

Hemos de solicitar del Sr. Fernández Díez que nos permita transcribir algunos capítulos de su transcendental obra, a fin de que nuestros lectores la conozcan.

Reciba el querido amigo, el ilustre escritor castellano, la expresión de nuestra gratitud por la justiciera defensa que hace del solar de nuestros amores.

lunes, 28 de octubre de 2019

Ferrocarril diagonal de Castilla: Béjar-Ávila-Segovia-Soria

Por Gregorio Fernández Díez

(El Adelanto, diario político de Salamanca, 17 de noviembre de 1929, p. 4)

Con los ferrocarriles denominados complementarios que actualmente se están construyendo (unos dos mil quinientos kilómetros), la verdad es que la estructura geográfica de España quedará alterada, ya que afectan a las comarcas, a los grandes espacios que carecían todavía del más eficaz medio de transporte en la vida moderna.

Las grandes masas de productos y las grandes distancias se han de transportar, se han de salvar económicamente, y por ello, las maderas, los carbones, los abonos, ladrillos, cementos, granos, bocoyes, etcétera, sin contar los ganados, volvamos a repetir que especialmente a grandes distancias no podrá aspirarse a que porte en camiones automóviles, cuyo radio de acción es limitado, y, por ello, hay que volver la vista al ferrocarril, hay que dejar de soñar en autopistas, lujo innecesario para nuestro país y convenir en que por otra parte, los automóviles y las carreteras no son, n pueden ser consideradas, sino como medio auxiliar de los caminos de hierro.

Para la construcción en España de nuevas líneas férreas es preciso tener en cuenta no los que necesita por su extensión territorial, sino los que son indispensables por su tráfico y por su número de habitantes, y, entonces, se deduce la necesidad de que los diecisiete mil kilómetros actuales lleguen, siquiera sea en un par de lustros, a veintidós mil, tanto porque todavía hay comarcas deficientemente servidas o apartadas de las líneas actuales, como porque el progreso nacional, lento, pero evidente y continuo, está marchando ahora con ritmo más acelerado, sin contar con que la agricultura, especialmente, ha de acrecer en términos insospechados a consecuencia de las obras y posterior irrigación a que darán lugar las Confederaciones hidrográficas constituidas o que en lo sucesivo puedan surgir.

Por ello considero que es llegado el momento de que cuatro provincias de Castilla se apresten a solicitar un ferrocarril común a todas, de alta conveniencia para las mismas: el ferrocarril diagonal de Castilla, por llamarle de alguna manera, el ferrocarril, digámoslo claro, de Béjar-Piedrahita, Ávila, Segovia, Riaza, San Esteban de Gormaz y Soria, o es su enlace con el de Santander-Mediterráneo, si es que no se quiere prolongarle hasta Logroño.


Tal ferrocarril, o cuando menos tal trayectoria, porque algunas secciones del mismo figuran incluidas en el plan de ferrocarriles regionales, le propuse yo, tres años hace, en mi libro "El Valor de Castilla", y consideré no solo que no es ningún disparate, sino lógico y conveniente para Castilla, y que es de tal naturaleza que las provincias interesadas deberían contar, y seguramente contarían, con el apoyo de las limítrofes, de las provincias hermanas, esto es,
de sus organismos provinciales, para recabar del Gobierno la construcción del mentado ferrocarril.

Esta línea férrea está plenamente justificada, porque numerosas comarcas de cada una de tales provincias, precisan comunicación de tan naturaleza con la capital, y, especialmente, la necesitan directa Ávila y Segovia con Soria, porque provincias hermanas es posible, no es lógico, que a estas alturas vivan unas de espaldas a las otras, sin trato, desconociéndose o poco menos.

Es presumible, claro está, que el gobierno accediese a la construcción, bien que condicionándo la seguramente a la colaboración, al apoyo económico de las provincias y de las localidades interesadas en su ejecución, sacrificio obligado, y desde luego, reproductivo, porque si la construcción es trabajo y alivio a la crisis campesina, una vez construido sería vida y actividad para los respectivos pueblos.

El ferrocarril Soria, San Esteban de Gormaz, Riaza, Segovia, Ávila, Piedrahita y Béjar, es preciso que se piense en llevarlo a vías de realización, aun cuando fuera de los denominados de carácter económico, como los del Norte de España, para reducir su coste, lo cual no sería difícil si los pueblos, las comarcas, las provincias a quienes afecta solidarizasen su esfuerzo, dejando a un lado la indiferencia, la apatía castellana, que es, acaso, la máxima dificultad para el logro de dicha aspiración.

Poner sobre el tapete este pequeño problema regional es lo que nos proponemos. Ahora, otros tienen la palabra.

domingo, 20 de octubre de 2019

Orientación ferroviaria e industrial de Soria

Por Píndaro

(Noticiero de Soria, 5 de julio de 1926, p. 1)

Pasaron las bullangueras fiestas de San Juan; la gente moza después de saturarse los bailes, tauromaquia, verbenas y fuegos de artificio vuelvan a su diaria labor, a su taller, a su comercio o a sus casas, conservando lo que queda de los tradicionales usos y costumbres, hasta el próximo año, en que se repetirá la función y el cartel con la única diferencia de que este cartel, el año que viene, podemos confeccionarlo con alguna sorprendente reforma que sirva de imán o atractivo por tierras del Cid y de la Montaña, toda vez que será un hecho la construcción del ferrocarril Santander-Mediterráneo y podrán visitarnos cómodamente, seguros, de hallar novedad y esparcimiento.

Y una vez más nuestra pluma, fiel interprete del pensamiento, recuerda o dibuja la trayectoria de un ferrocarril que abrirá espléndidos horizontes a nuestra ciudad, orientando el desarrollo de
su economía, industria y comercio a la sombra protectora de sus caminos de hierro que la explosionen y reanimen que la sirven de acicate y poderoso estímulo al resurgir de sus contenidas fuerzas e
iniciativas.

Reiteramos nuestra opinión, Castilla, Soria, sin abandonar su condición agrícola, es decir la tierra, el pan nuestro de cada día, debe ir ganando terreno y procurar su industrialización, ya que a ello le brinda el medio ambiente, las circunstancias del momento, la actualidad, el cruce de dos extraordinarias vías férreas, y al mismo tiempo el contar en su suelo y en su vuelo, aquellos elementos primordiales de materias necesarias al desarrollo y prosperidad de la industria, de la fábrica, de los altos hornos.

Dice el autor del "Valor de Castilla" "la humilde, la más humilde que pobre, Soria, con solo los ferrocarriles de Calatayud a Santander y el de Castejón, cambiaría totalmente de aspecto. Singularmente la capital con el cruce o empalme de las mencionadas líneas férreas, saldrá ganando muchísimo, siendo paso obligado, de un lado entre el Cantábrico y el Mediterráneo y de otro entre Logroño y Navarra con Madrid". Esto es, la expansión de su vida.

Alude a las ricas minas de Ólvega, a propósito del Soria-Castejón y advierte se está pensando en la instalación de altos hornos a base de esa zona minera, en Tudela.

Esto lo apunto para que tomen nota quien quiera que sea y a base de esa riqueza del subsuelo, Ólvega, Soria o Ágreda, minen el terreno, el ambiente, o alguna sociedad bancaria, para que arriesgue su  capital construyendo estos altos hornos, considerando que el que se adelanta gana.

Y de igual manera, que a lo largo del Valladolid Ariza, Soria debe fomentar inmediatamente la industria azucarera a lo largo del Santander-Mediterráneo, al cruzar el fecundando nuestra provincia,
debe instalar numerosas fábricas de maderas, muebles, resinas, papel; en Cidones y Soria, fábricas de cristal y vidrio por la abundancia de la sílice y por doquier la expansión de la lana y la rica manteca transformada en su renombrada mantequilla.

Castilla tiene poderosas energías morales y de cultura; solo esperan que algún valeroso caudillo las recoja, las encauce y las fomente; no debemos resignarnos a que monopolicen la industria nacional otras regiones, como Cataluña y Vasconia, favorecidas por el arancel, notablemente.

Puesto que cuenta Castilla con elementos propios, debe reconstituirse económica e industrialmente, creando una vida propia, dentro del extenso, "armonizando" su progreso agrícola con el industrial; sacudir nuestra indolencia, para no sentirnos inferiores a ninguna otra comarca o región.

Es una modalidad del sentimiento patriótico que estamos en el deber de propagar, afirmar el sentimiento castellano, no solo con un amor platónico a la tierra en que nacimos, sino anhelando y consiguiendo su progreso material, en mejoramiento industrial, siendo para ello lo más inmediato y urgente, lo fundamental y más político, construir en esta alta meseta de Castilla unos cuantos miles de kilómetros de ferrocarril y regar unos millares de hectáreas de secano.

Dadme un punto de apoyo y moveré la tierra, eso quiere Castilla y por ende Soria; vías férreas, unos pantanos o canales de riego y moverá floreciente la riqueza que atesora.

lunes, 14 de octubre de 2019

Carta de Gregorio Fernández Díez al Alcalde de Madrid (1943)

Barcelona, 2 de julio de 1943

Sr. D. Alberto Alcocer
Madrid

Muy señor mío:

Quince días hará que me permití escribir a usted manifestándole haber publicado en "El Economista" del 12 de junio, creo, que un documentadísimo y entusiasta artículo titulado "El Progreso industrial de Madrid y su Feria de Muestras". Alentaba ese certamen y ponía de relieve ser en efecto Madrid como provincia industrialmente la tercera y como ciudad la segunda de España; aplaudía el acuerdo de ese excelentísimo Ayuntamiento había tomado y denunciaba la oposición del editorial de 10 de mayo pasado de "Economía mundial" contra el futuro certamen. Ha tenido tan escasa prensa ese acuerdo que, sin necesidad de que yo le escribiera parecía lógico que la representación que ostenta, que hubiera dado las gracias al "Economista", pero me parecía natural una breve pero cortés respuesta a mi atento y desinteresado propósito. No concibo una descortesía como la que usted ha incurrido. Un mínimo de gratitud por esa ciudad, poco defendido siempre desde ahí y bastante atacada desde fuera, me habría aconsejado a mí, si inversamente hubiera ostentado su representación, a proceder más en armonía con los deberes de urbanidad. Claro que, recapacitando, no me sorprende. Somos paisanos, y no sé que jamás haya hecho usted nada ni por Briviesca, ni por Burgos, y debí figurarme que su interés por Madrid no sería mayor. No es lo mismo servir a Madrid que servirse de Madrid. En fin pobre gran villa. Con un alcalde burgalés y hace poco con un Presidente de la Diputación gallego está buena. Y nada más, señor, recomendándole que dé un repasito a una cartilla de urbanidad; soy de usted afectísimo, s.s., 


Gregorio Fernández Díez (rubricado); y si no le interesa que Madrid se industrialice, a mí plin. Y si no tiene usted el gesto de protestar contra la disposición de la Dirección de Comercio, que impedirá que la Feria sea nacional o internacional, solemne bofetada a Madrid, se dimite.

domingo, 4 de agosto de 2019

El alma castellana

Por César Real

(El Castellano, diario de la mañana (Salamanca), 27 de agosto de 1906, p. 1)


Idólatra de su culto la he buscado en el campo, donde vivo y en la próxima ciudad, en el corazón mismo de Castilla la Vieja, en la capital del hidalgo reino castellano.

¿Dónde está?

Quizá se mece esfumada en los ensueños de progreso de la gente culta que viaja, lee, escribe y hablo en los círculos, periódicos y academias de la población; acaso anima y conforta a los industriales y obreros que luchan denodadamente por llegar a un límite de perfeccionamiento, en la transformación de los productos del país y de otras regiones donde queden vencidas las dificultades y riesgos de la competencia ruinosa que ahora sostienen; probable es que flote agitada sobre los mares de enceradasmieses por  el dorado abanico de espigas que nació, vivió y cae en el surco al golpe tajante de la hoz; ¡quién sabe si yace adormecida con el robusto "hachero" que
sestea a la sobra tibia y perfumada del pino secular que se yergue altivo, como si desariara los rayos abrasadores de un sol a quien aguanta igual resignada gallardía que a la nieve invernal!

No sé si alguien lo ha dicho ya: pero a mí se me ocurre que el pino es algo así como nuestro árbol de Guernica; con la diferencia de que los vizcaínos cultivan y protegen el venerado emblema de sus libertades y fueros, y los castellanos duermen o dormimos a la sombra, cada vez más débil, de nuestro símbolo, viven aun, porque la sobriedad les permite sostenerse en campos semiestériles y su fortaleza resistir los embates de la atmósfera enemiga que le
rodea, y su longevidad ir acumulando ejecutorias de nobleza que no sirvieron ni le valen más que para lucirse con el humo de la vanidad que aparentemente anula los achaques de una senectud decrépita.

Indudablemente Castilla duerme y sueña.

No despertará seguramente por las excitaciones de los hambrientos de la legión famélica, porque esta se satisface con muy poco. Sin duda se ha logrado en gran parte en nuestra región reducir el estómago al mínimo de capacidad. Tamposo ha de volver a la realidad por vías del buen cálculo de la gente ilusrada porque las debilidades, físicas y ostentorias de su intelecto, son insuperable obstáculo.

Pero aun conservan los castellanos -principalmente los campesinos- una fibra muy sensible a las impresiones que por el medio de ella se les comunica; el corazón tan sincero, tan blando y generoso, como el de los niños.

Y no hay nadie que llegue al corazón de las muchedumbres más fácil y eficazmente que los poetas.

Galán quizá no hubiera llegado a ser el mejor de los poetas castellanos; pero sí ha sido el mejor castellano de nuestros poetas.

Nadie ha contribuido tanto como él a levantar el espíritu regional.

Pero eso tiene tan fervientes admiradores de su obra entre los regionalistas castellanos.

Su labor ha dejado raíces muy hondas. Fundó una escuela: la de la poesía castellana.

Ya tiene discípulos que proseguirán su acaso intuitivo, patriótico empeño.

Dentro de muy poca ha de imprimirse un hermoso libro de versos, del que es autor don César de Medina Bocos, y en el cual figurará en primer término la siguiente hermosísima composición:

EL CANTO DE LA ALONDRA

(Con motivo de la muerte de Gabriel y Galán)

En la tarde serena,
En medio del vivir pobre y sencillo,
Al descansar de rústica faena
¡Qué dulcemente suena
El alegre cantar del pajarillo!...

Mas el campo en que vierto mis sudores
Es árido y desierto,
Ni tiene bellas campesinas flores,
Ni música de pájaros cantores
Turba la calma del paisaje yerto.
De su aridez mi espíritu cansado
¡Con qué placer tan hondo
Recogiera en su fondo
El melodioso canto regalado
Con que una tarde a consolarme vino
"Una alondra del páramo vecino"
Yo escuché en su canción el rugido grato
Del agua cristalina del regato
Que los chopos refleja,
Y ese dulce lamento
Que produce, movida por el viento,
"La copa verde de la encina vieja."
El murmullo sonoro
Del mar de espigas de oro,
Mecido blandamente por la brisa,
La voz vaga, indecisa,
Del campo al despertar en la alborada,
De la rústica gaita tonada,
El mujir del terneno en la pradera,
El ruido de la era
Y la canción honrada
Del gañán al cantar la sementera...
Todos, todos los ruidos
Que me son tan queridos
Sonaron en su música divina:
¡Que nutría sus cantos seductores
Con todos los acentos y rumores
Que forman la sonata peregrina
Del campo, donde tengo mis amores!

¡Breve fue mi alegría!
La alondra que raudales de armonía
Vertió de mi vivir para consuelo
Dejó mi campo al declinar el día;
Yo, con la vista, la seguí en su vuelo...

¡Ya la he perdido en el azul del cielo!
Pero su canto ¡le oigo todavía!

Mi querido amigo Medina Bocos es también político -diputado provincial- y labrador.

Había yo venido a Valladolid retorciendo en mi mente una frase inspiradísima, salvadora. "Es preciso oponer a la solidaridad catalana".

Pero, ¿cómo va crearse la solidaridad castellana, quién la va a dar impulso?, me preguntaba ya, y estaba decidido a preguntárselo aquí, en la capital de la región, a políticos industriales, labradores, obreros, hombres de ciencia...

Y una mañana, en la Acera de San Francisco, encontré a Medina; íbale a interrogar, como labrador y político, acerca de este movimiento regional y se anticipó recitándome parte de los versos de su futuro libro.

Ya sé, dije para mí, mientras le escuchaba, quien ha de despertar al robusto "hachero" que sestea a la sombra tibia y perfumada del pino secular... para cultivarle y defenderle.

Valladolid y agosto 1906

domingo, 21 de julio de 2019

Tierra Castellana

(Lábaro, diario independiente (Salamanca), 1 de abril de 1905, p. 1)

Con este título verá pronto la luz pública en Valladolid una revista semanal, consecuencia del resurgir de Castilla, iniciado en Valladolid y confirmado en Salamanca con la Federación periodística castellana.

Mejor que nosotros pudiéramos hacerlo, explica los propósitos de aquélla la siguiente circular:

"La obligada y conveniente confesión de propósitos al empezar la publicación de una revista, es deber para nosotros muy difícil de cumplir, porque el programa es sencillísimo: fundar un centro que sea punto de convergencia de los intelectuales de Castilla, y en el que, a nosotros, nos corresponda solamente el papel de mandatarios, de servidores de los que en Castilla discurren y escriben y trabajan para gloria y utilidad de la región.

Tierra Castellana no va a ser una publicación de Valladolid, el púlpito predicadores. Queremos que sea la hoja a que acudan cuantos escriben de toda clase de conocimientos, para que, volandera por el mundo, lleve todos los límites la hermosa y potente manifestación de la mentalidad de Castilla.

Para nosotros la mecánica de ajustar trabajos en la revista, según el gusto de los lectores y los intereses de la vida regional: es decir, para nosotros lo fácilmente hacedero y sin valor. Para los robustos entendimientos castellanos el discurrir sobre todo lo que pueda ser la palpitación del alma de Castilla, una oleada de viento de la llanura, glóbulos desangre para el cuerpo de la región.

Por eso estamos seguros del éxito feliz de Tierra Castellana y del cariñoso acogimiento que Castilla le ha de prestar.

A estas páginas han de venir, enlazados, los hombres maduros que descuellan por saber y los ricos de promesas en la brillante juventud; los monumentos y las joyas artísticas, folios del magnífico libro de la grandeza castellana, los paisajes severos del terruño que tonaliza, fulgurado al sol; la actualidad industriosa o mercantil, científica o literaria que dicen del valer de los regionales; la información agrícola que abre horizontes al progreso o al cálculo de los que del campo viven...

A las columnas de Tierra Castellana vendrán, en fin, el alto pensar, el hondo sentir y el fuerte querer de la raza que puebla la llanura, las estribaciones de dos cordilleras y las orillas de su mar de Cantabria.

Nada que a Castilla importe escapará al estudio de las plumas castellanas, y aquí, cuando los años pasen,habrán de venir los trabajadores con patriotismo a ver cuánta era la potencia intelectual de los castellanos de hoy, cómo se promovía lo que a la región interesaba, y cómo sabíase huir de los recovecos de la política, respetando todas las opiniones, porque si ésta teóricamente es el arte de la gobernación, tal andan sueltas las bastardías y desaprensiones que resulta azote de los pueblos, discordia que todo lo esteriliza.

Luchadores por Castilla los ínfimos, los que estaremos en Valladolid al pie de Tierra Castellana, luchadores por Castilla, los grandes, los que han de avalorar sus páginas; luchadores todos, y todos con voluntad firmísima y amores hondos del alma para la tierra madre, nuestra revista de Castilla será buena, será honrada, como le cumple ser, y ha de lucir su nombre, sin sonrojos, allí donde más enérgica palpite el alma española.

Pronto verá la luz el primer número de Tierra Castellana, y si el acaso no por las dificultades que surgen en los comienzos de estas obras, los sucesivos han de probar cumplidamente que Tierra Castellana viene a la vida con ánimo seguro de no ceder a nadie en la lucha brava y tenaz por cuanto sea manifestación o barrunto de la vida regional".

Los precios de suscripción serán:

Trimestre, pesetas 2; semestre, 4; año, 7; número suelto, 20 céntimos.

Nota.- Hasta nuevo aviso pueden hacerse las suscripciones, previo pago en las Administraciones todos los periódicos de Castilla.

sábado, 20 de julio de 2019

Solidaridad castellana

Palencia y Burgos 

Por Gregorio Fernández Díez

(Diario de Burgos, 12 de octubre de 1929, p. 1)
 
La ciudad hermana, Palencia de Castilla, así con este apelativo, ha recibido cordialmente al Orfeón Burgalés y a los expedicionarios que le acompañaban; ha sido aplaudido y han sido obsequiados con largueza y con efusión fraternal, los excursionistas; pero, es ocasión para que nuestra embajada no sea un acto de mera reciprocidad a la visita de los palentinos y de su Coral, sino que es preciso que mutuamente inauguren un periodo de relaciones que jamás en lo sucesivo se interrumpa.
 
Si hoy son los Orfeones los que se corresponden, mañana y pasado y al otro deben ser los Ateneos y los clubs deportivos, y los claustros de los Institutos y Normales, los que organicen recíprocas y continuas visitas, pues que, aun cuando la distancia es corta, el trato, las relaciones no eran frecuentes, no eran continuas, y es preciso que lo sean, porque de la solidaridad castellana, de la solidaridad de nuestras provincias, pueden derivarse no pocos beneficios esencialmente espirituales, para Castilla, la gran calumniada.
 
La disociación castellana es grande; cada provincia parece un compartimento estanco, y eso tiene que terminar; debe concluir, de la única manera viable, tratándose, juntándose para exaltar y defender todo lo que les sea común. Y lo común a las provincias castellanas es Castilla, es su historia, su raza, su lengua, sus costumbres, sus intereses, tantas peculiaridades, en fin, que, no siendo patrimonio de ninguna, corresponden a la colectividad.
 
Sí, Castilla tiene también sus peculiaridades tan dignas, tan ejemplares, tan nuestras, que debemos exaltarlas y defenderlas. Están un poco soterradas, y ello implica el deber de sacarlas a flote, limpiarlas y exhibirlas. Ahora, por ejemplo, el Orfeón ha demostrado, como lo han hecho antes las corales de las ciudades hermanas, Zamora y Valladolid, que existe una gran variedad de tonadas y cantares castellanos; que existe, en fin, una música castellana, como ha dicho con su autoridad el maestro Benedito.
 
Queremos significar, digámoslo con claridad, que es preciso hacer un poco de regionalismo, planta que no es del todo espontánea en ninguna parte, sino que se debe cultivar con esmero. Con ello iríamos ganando mucho, por lo menos ganaríamos el respeto ajeno, hoy harto debilitado, por nuestra propia culpa, por nuestro provincialismo absurdo.
 
Apena, apena ese provincialismo, en el que no puede haber la menor espiritualidad porque nada evoca. Aquí hemos andado estos días atrás, por ejemplo, defendiendo el burgalesismo de Pedro de Mendoza, de Juan de Salazar, de Juan de Ayolas, fundador de la Asunción. Y todo, porque no hemos sabido crear un Instituto de Estudios Castellanos, según yo proponía en mi obra "El Valor de Castilla". Si lo tuviéramos, esos estudios, esas investigaciones históricas, nos hubieran consentido, esto es, hubieran consentido a Castilla un más lucido papel en la Exposición Iberamericana de Sevilla, en la que Castilla, verdadera descubridora de América por inspiración de Isabel la Católica, representa, lamentable es confesarlo, triste papel.

Mas el pueblo castellano, ciertamente inconstante, impulsivo, pasa pronto de los entusiasmos a la indiferencia y, por ello, yo, temiendo que la aproximación palentino-burgalesa sea meramente externa, considero que se impone un pacto del que puede surgir, no para ambas ciudades, sino para ambas provincias, algo práctico y tangible.

Los ferrocarriles Aranda-Palencia y Burgos-Sahagún por Carrión, tan interesantes, tan necesarios para ambas provincias, pueden ser, deben ser una de las finalidades que mancomunadamente deben solicitar hasta verlas convertidas en realidad.

Nada hay que acerque más a los pueblos que los intereses materiales: creemos intereses y crearemos afectos. Estos ferrocarriles harán más por las relaciones palentino-burgalesas que todos los discursos, que todos los cambios de telegramas entre las autoridades por entusiastas y sinceros que sean, que sí que lo son. La amistad, la fraternidad, requiere algo más que mutuos agasajos. Motivos tienen Palencia y Burgos, para laborar juntas en lo material y en lo espiritual por su prosperidad y enaltecimiento de Castilla.

martes, 28 de mayo de 2019

Las diputaciones cerealistas

(El Liberal arriacense (Guadalajara), 4 de setiembre de 1915, p. 1)

Si la idea de la federación de las provincias cerealistas se lleva a afecto, es indudable que esa nueva Mancomunidad ha de traducirse en un principio de resurgimiento regional, de incalculables y beneficiosos resultados. La actuación directa de las provincias cerealistas, representa las por un organismo central fuerte y prestigioso, puede contribuir de manera eficacísima a la dignificación del agricultor castellano, a su mejoramiento moral, intelectual y material y como consecuencia lógica, al progreso de Castilla, región que tal vez por ser la cuna de la nacionalidad española, es la menos atendida y la peor tratada.

Celebremos, como amantes de la región, la iniciativa del dignísimo presidente de la Diputación de Salamanca, D. Nicolás del Toro, y desde luego, nuestro modesto concurso está a la disposición de los cerealistas para realizar esta labor de enaltecimiento y vigorización de la región castellana.

El Valor de Castilla

Por Ángel Dotor y Municio

(Argamasilla de Alba, 1898-1986) 

(El Consultor bibliográfico, p. 360)

Gratísimo para nosotros, entusiastas, más por identificación espiritual que por origen, de la región cuna de la nacionalidad y de la raza, todo cuanto tienda a la exaltación de Castilla. Y más que a la exaltación lírica y abstracta —pues de nadie que la conozca son ignorados sus relevantes valores—, al divulgador análisis de la misma. Por eso tenemos que señalar con aplauso la aparición de toda obra en que se explane, ya sea con los bellos ropajes literarios o, sencillamente, con el sólo propósito de la vulgarización, el significado y el papel relevantes que siempre he de ostentar en el arte y en concierto articular español la tierra central de la península.

martes, 21 de mayo de 2019

El Estatuto castellano

Por ELE

(Heraldo de Zamora, 22 de mayo de 1936, p. 1)


Se va haciendo ambiente regionalista en las provincias castellano-leonesas, espoleadas por la iniciativa de don Mauricio García Isidro.

Castilla, "la de las pardas onduladas cuestas", la cuna de las libertades que tuvieron en epílogo en Villalar, viene resultando la víctima de las demás regiones.

Y al amparo de la Constitución, lo que ha logrado Cataluña y van a pedir los vascos y Galicia y Aragón y Valencia, Castilla puede obtenerlo.

El artículo 11 de la Carta Magna de la República española, dice que si una o varias provincias limítrofes, con características históricas, culturales y económicas comunes, acordarán organizarse en región autónoma para formar un núcleo político-administrativo, dentro del Estado español, presentarán su Estatuto con arreglo a lo establecido en el artículo 12, pudiendo recabar para sí, en su
totalidad o parcialmente la defensa sanitaria en cuanto afecte a intereses extrarregionales, la policía de fronteras, inmigración, emigración y extranjería y fiscalización de la producción y el comercio de armas, sin perjuicio en el segundo caso de que puedan recabar todas, o parte de las restantes, por el mismo procedimiento establecido en el Código fundamental.

La iniciativa del señor García Isidro ha tenido la virtud de despertar la conciencia de Castilla, que estaba amodorrada. Precisamente, coincidió con la asamblea de Caspe y el surgimiento de los anhelos regionalistas de los vascos y de los gallegos. Los primeros, desaparecida la aspiración de un Estatuto vaticanista de los nacionalistas han sumado en favor de su causa a los elementos de izquierda.

Todas las regiones van siguiendo el ejemplo de Cataluña. El Estatuto es un privilegio y la Constitución reconoce la igualdad de todos los españoles ante la ley.

Sin embargo mucho nos tememos que aquí no cuaje la idea. Somos demasiado individualistas y extremadamente apegados al terruño.

Ya verán ustedes como se repetirá el cuento de la lechera. Gastaremos mucha pólvora en salvas y al final echaremos todo a rodar por la elección de la capitalidad o por otra futesa por el estilo.

De todas suertes, convienen iniciar el movimeinto regionalista castellano-leonés. Y ya se sabe que el movimiento se demuestra andando. Queremos decir que no basta con lanzar una idea. Hay que arrojar la semilla en el surco. Preparando el terreno lo está. Falta la propaganda activa. ¿No sería el propio señor García Isidro el más indicado para encauzarla?

Colaboradores eficaces, han de sobrarle. Entre ellos nosotros.

Madrid, 20-5-1936

martes, 5 de marzo de 2019

Deuda en pie

(Tempestad (Segovia), 24 de abril de 1890, p. 1) 

En esta fiesta, a la cual concurrieron respetables personalidades de Valladolid y Zamora y la ilustrada prensa de ambas capitales, pronunció el Sr. Alcalde de Villalar D. Fermín Vidal Rodríguez un discurso apologético de los comuneros:

"Si hay actos en la vida de los pueblos -decía el digno Sr. Alcalde, con tono velado con la emoción-, que dejan imperecedero recuerdo, seguramente uno de ellos será, para esta mi querida Villa, la construcción del modesto obelisco que tenemos la dicha de solemnizar hoy; el cual monumento, aunque pequeño y humilde como nuestros escasos recursos, no será por eso meses exacto símbolo conmemorativo de la gloriosa epopeya, cuyo teatro fueron los campos y Plaza de Villalar el 23 y 24 de abril del año 1521.

Hoy hace 368 años que derramaron su sangre y dieron su vida por la libertad patria, los valientes castellanos D. Juan Bravo, D. Juan de Padilla y D. Francisco Maldonado. ¿Y sabéis por qué delito les condenaron? ¡Ah, señores! Pues precisamente porque pedían y querían lo mismo que ahora piden y quieren también los diputados de Castilla, cuando clamen por la baja de tributos, por la equidad en el reparto de las contribuciones, que todos pechen por igual"
.

viernes, 1 de marzo de 2019

El Estatuto de Castilla

(La Libertad (Madrid), nº 3845, 16 de julio de 1932, p. 8)

La minoría federal ha presentado al Ayuntamiento la siguiente proposición:

"Que se constituya una Comisión de concejales que inmediatamente estudie las peticiones que el Ayuntamiento, en nombre del pueblo de Madrid, ha de sostener cerca de las Cortes Constituyentes en lo referente a subvención de capitalidad, régimen de autonomía, Hacienda y cerca de los demás pueblos de Castilla promoción del estudio de un Estatuto castellano y posición más conveniente para
Madrid en este asunto, así como cuantos se relacionen con esta cuestión para la mejor defensa de los intereses y con el mayor respeto para las demás regiones españolas, con lo cual nuestro pueblo dará la mejor prueba de tradicional serenidad y su capacidad para resolver los problemas"
.

martes, 26 de febrero de 2019

La fiesta de León y Castilla

(El Día de Palencia, defensor de los intereses de Castilla, nº 12727, 4 de julio de 1930 julio, p. 4)

Por unanimidad se aprobó la siguiente moción de don Santiago Calderón Martínez de Azcoitia:

"A la Comisión Municipal Permanente.- De cuanto se ha hecho para celebrar con actos de persurable y grato recuerdo, algún festejo que incluir en los programas que se vienen haciendo para las Ferias de Palencia, no es aventurado asegurar que la Feria Castellano-Leonesa ha sido la que ha llenado cumplidamente todas las exigencias, y que de ella se conserva la impresión que dejan aquellas cosas que íntimamente nos complacen, debido solamente, todo ello, al apoyo que este excelentísmo Ayuntamiento le prestó y al incondicional y eficaz concurso de la Prensa palentina, alma de aquella
fiesta.

Si ello, todo esto ya es bastante para que el Ayuntamiento de Palencia se sienta satisfecho por haber sido el iniciador de estos festejos -que tanta importancia pueden tener- hemos de reconocer que hay que ver en esas fiestas otra significación de más interés e importancia, y una mayor perduración. La exaltación regionalista que, a no dudarlo, nace y brota con pujanza en estos momentos en que las provincias comunes en sus afectos y en sus aspiraciones, se unan estrechamente y dan a conocer cuanto en ella significa el espíritu tradicional.

Debe, pues, a juicio del concejal que suscribe, intensificarse por todos los medios, ese saludable espíritu de amor a la región, base de todos los amores comúnmente sentidos, y para ello, los Municipios en primer término están obligados a que aquella labor no decaiga y por el contrario, logre mayor esplendor posible.

A estos afectos me permito proponer cuanto sigue:

El Ayuntamiento de Palencia se dirigirá a todos los de la región castellano-leonesa, interesándoles que en sus presupuestos consignen la cantidad que estimen conveniente para subvencionar todos los años la Fiesta Regional de León y Castilla.

Anualmente se celebrará esta Fiesta, poniéndose previamente de acuerdo los Ayuntamientos de los antiguos reinos de León y Castilla para formar el oportuno programa.

A ella concurrirán cuantas representaciones estimen oportuno aportar los respectivos Ayuntamientos.

La organización de esa Fiesta, fecha de la misma, etc. Correrá a cargo de aquellos Ayuntamientos, quienes con tiempo oportuno se ocuparán de reunir cuantos datos sean necesarios, para que la Fiesta Regional revista y tenga toda la importancia que la misma merece.

No obstante, la Comisión resolverá lo que estime más oportuno.

domingo, 24 de febrero de 2019

Mauricio García Isidro

Por Mauricio García Isidro

(1891-Madrid, 1984) 

(El Adelanto, diario político de Salamanca, 19 de mayo de 1936, p. 1)

 
"Castilla y León, a estos efectos, es una sola región con idénticos problemas y exactas características y no existe nada que nos haga encerrar en el hermetismo de las tres provincias, León, Zamora y Salamanca. Puede extenderse la base del Estatuto a un territorio integrado por más, incluyendo a Santander, salida al mar de Castilla, donde se puede crear el puerto franco, que evite la tenebrosa actuación del homólogo barcelonés y nos dé la zona textil de Cabezón de la Sal, condenada a muerte en plena juventud, por la prepotente influencia catalana, cegadora de toda competencia peligrosa para su industria depauperada por el abandono y la crisis que tanto la ha hecho retroceder ...".

sábado, 23 de febrero de 2019

Bloque Regionalista Castellano

(Eco del Tormes (El Barco de Ávila), 13 de enero de 1918, p. 3)

El martes tuvo lugar en Arévalo el anunciado mitin, que las Juntas locales constituidas celebraron los elementos organizadores del Bloque Regionalista, atento a los intereses de la tierra y que tremola la bandera de la autonomía municipal, el mejoramiento de las haciendas locales, política agraria, ganadera e hidráulica, consecueción de vías de comunicación y fáciles transportes y aranceles beneficiosos para la agricultura.

Nos dicen de la vecina ciudad que todos los pueblos comarcanos se reciben noticias dando cuenta del gran entusiasmo reinante con motivo de este acontecimiento y en Arévalo todas las impresiones convienen en que el acto ha sido importante.

Los oradores muy aplaudidos y Basilio Álvarez el querido maestro de "El Parlamentario" recibido con entusiasmo y ovaciones.

jueves, 21 de febrero de 2019

Movimiento político

(El Liberal (León), 17 de julio de 1881, p. 2)

El Independiente Zamorano, ocupándose del manifiesto aprobado en las reuniones de la gran manifestación proteccionista del día 26 de junio, escribe las siguientes líneas:

"Por lo mucho que interesa a todos, y especialmente a las provincias de Castilla, insertamos a continuación el gran manifiesto que al país dirige el Fomento de la Producción Española.

Llamamos a la atención de nuestros lectores, y cuerpo electoral de la provincia, para que fijandose en el espíritu a que aquel obedece,
no sean sorprendidos incluso los derechos que les corresponden.

Ha llegado la hora de pensar y obrar seriemente sobre el porvenir de Castilla: si Cataluña necesita de la justa protección de su industria, Castilla no necesita menos para la suya, para sus granos y caldos, así que la unión se hace indispensable por la igualdad de intereses. Hoy estamos a tiempo de evitar males, y como mañana seria tarde preciso es que, los electores y las influencias del país se
preparen a la lucha con patriotismo y con el interés que cuestión tan vitual en sí mismo entraña".

Con razón dice nuestro colega la Gaceta de Cataluña:

"Ya no se bastará a El Liberal hablar de catalanismo.

El castellanismo entra en juego."